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Muy buenas, bienvenido de nuevo al curso fácil sobre escoliosis para padres preocupados. Hoy llegamos a la última lección, la número 5, y vamos a hablar de un tema que genera muchas dudas y también algo de miedo: el corsé.

Pierde el miedo al corsé

Lo primero que quiero decirte es esto: tienes que perderle el miedo al corsé. Te lo digo por experiencia con los chicos que llevan corsé más de un año. Siempre les pregunto: ¿una vez que te has acostumbrado, es tan malo como pensabas? Y la mayoría responde que no. Al principio cuesta, es un rollo, pero una vez adaptados lo llevan sin mayor problema porque saben que es lo mejor para ellos.

Así que, si el médico ha indicado un corsé para tu hijo, lo más importante es que tengas la determinación de que es la mejor opción para evitar que la escoliosis empeore y termine en cirugía. Esa confianza tienes que transmitirla a tu hijo para que él también crea en el tratamiento.

¿Cuándo se indica el corsé?

El corsé se recomienda cuando hay un riesgo importante de que la escoliosis empeore durante el crecimiento y pueda llegar a niveles en los que la cirugía sea necesaria (más de 45-50 grados).

Ese riesgo depende de dos cosas:

  • La magnitud de la curva (cuántos grados tiene la escoliosis al diagnosticarla).
  • La madurez ósea, es decir, cuánto le queda por crecer al niño.

Cuantos más grados tenga y más crecimiento quede, mayor será la necesidad del corsé.

Para que el corsé funcione, tienes que cumplir estas 4 reglas básicas:

  1. Confía en el corsé y no transmitas dudas a tu hijo.
    Confía en la evidencia científica y sé fuerte. Es duro ver a tu hijo con corsé, pero es peor tener que verlo pasar por una cirugía.
  2. Sé firme con las horas que debe llevar el corsé.
    No reduzcas las horas por pena o comodidad. El tiempo de uso prescrito es clave para evitar que la curva empeore.
  3. Ajusta bien el corsé.
    Un buen ajuste es tan importante como el tiempo de uso. Sigue las indicaciones del ortopeda para que el corsé ejerza la corrección necesaria.
  4. Combina el corsé con ejercicios específicos.
    Un programa de ejercicios adecuado mejora la flexibilidad, la fuerza muscular y el control postural, potenciando la eficacia del corsé.

Y si tienes dudas…

Si en algún momento tienes inquietudes, dificultades para que tu hijo lo use o sientes culpa, consulta con un especialista. Te podrá guiar y ayudar a tomar las mejores decisiones para tu hijo.


Para terminar

Confía en el corsé, transmítele esa confianza a tu hijo y acompáñale con amor y determinación. Esta es la mejor manera de ayudarle.

Con esta lección cerramos el Curso Fácil sobre Escoliosis para Padres Preocupados. Hemos aprendido qué es la escoliosis, cómo se clasifica, qué papel tiene la fisioterapia y hoy, cómo usar el corsé correctamente.

Ha sido un placer acompañarte. Espero que esta información te haya dado más seguridad y tranquilidad para seguir ayudando a tu hijo.

Y recuerda, si quieres resolver dudas concretas o necesitas ayuda personalizada, puedes solicitar una consulta online conmigo. Desde donde estés, te ayudaré a entender mejor el caso de tu hijo y a tomar decisiones con confianza.

👉 Solicita tu consulta online en www.laescueladelcuerpo.es

¡Hasta pronto!

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